La oficina es casi nuestra segunda casa por decirlo de alguna manera. Pasamos muchas horas allí trabajando solos y/o en equipos, por eso hacer de ella un lugar agradable y acogedor nos facilitará nuestro trabajo y nos hará sentirnos mucho mejor y eso siempre se traduce en un trabajo mejor hecho y más rentable. ¿Quieres algunas ideas para hacer de tu oficina un lugar acogedor? Pues toma nota.
- El color de la pared. No es ninguna tontería, hay colores que ofrecen mucha calidez y confort a las oficinas. El amarillo, el naranja, los colores crema…
- Una pequeña fuente de agua. El sonido del agua relaja. Hay fuentes de agua realmente bonitas, con un mecanismo muy sencillo que mueven la misma agua una y otra vez consiguiendo un ambiente distendido. Apuesta por las fuentes de corte minimalista y descarta las típicas fuentes orientales que no están nada de moda.
- Las sillas. Las sillas de oficina deben ser cómodas, ergonómicas para que todas las horas que vas a pasar trabajando no acabes con el cuerpo dolorido. Las sillas estilo Eames son especialmente cool.
- Personalizar. Personaliza tu oficina. Dótala de esos objetos que son propios de tu personalidad; te ayudarán a sentir que estás como en casa. Fotografías, cuadros, objetos de colección…
- Las luces. Los juegos de luces son imprescindibles para crear espacios acogedores. Siempre que puedas apuesta por la luz natural, además de ahorra luz, no hay nada como la luz natural para dar alegría a las estancias. Si te lo puedes permitir sustituye las luces de neón o combínalas con alguna lamparita. Las luces de neón son tremendamente impersonales.
- Las flores. Las flores sí, pero no cualquieras. Trabájatelo un poquito y busca unas flores especiales aunque te cuesten un poquito más; si coges cualquier ramo de flores le darás un aspecto «cutre» a tu oficina.