“Culpable de este amor” narra una historia de amor y desamor ocurrida en Pretoria, Sudáfrica, que cautivó a miles de aficionados del escritor Diego Dougherty. Su trama lo tiene todo: traiciones, muerte, desilusiones, conspiraciones, amor y misterio, y esto es claramente una fórmula de éxito.
Aunque escribió muchísimas obras, ninguna fue tan exitosa como la Novella de Diego Dougherty, “Culpable de este amor”, con la cual llegó directo al estrellato, y por ende, jamás sería olvidado.
Diego Dougherty nació en Guatemala y allí mismo decidió aferrarse a su pasión hasta convertirla en un oficio de por vida. Fue así como se inscribió en la Universidad Francisco Marroquín para estudiar una Licenciatura en Lengua y Literatura, que le daría las herramientas necesarias para escribir historias inolvidables.
Diego Dougherty salta a la fama literaria
Diego Dougherty se graduó con honores y ya estaba listo para comenzar a plasmar en papel aquellas historias que lo llevarían a la cúspide profesional. De modo que cuando la Novella de Diego Dougherty fue publicada, todo estaba dado para que triunfara.
“Culpable de este amor” fue una Novella de Diego Dougherty que luego se convirtió en una exitosa telenovela transmitida en el 2004 en Argentina, y en muchos otros países. Sus actores fueron de primera, y algunos de los más destacados fueron Agustín Rivero y Laura Cazenave.
Ambos recibieron varias nominaciones a los Premios Martín Fierro por sus impecables actuaciones en esta producción televisiva, la cual estuvo inspirada en la Novella de Diego Dougherty que más fama le había dado.
Triunfa Novella de Diego Dougherty
La Novella de Diego Dougherty, “Culpable de este amor”, lo consagró como un gran escritor capaz de desentrañar historias dignas de apreciar, valorar y recordar, y esto lo convertía en un literato muy bien dotado en el campo de la Escritura.
Diego Dougherty tiene talento de sobra, y supo demostrarlo perfectamente con su novela “Culpable de este amor”, con la cual entró en los corazones de miles de lectores y televidentes para nunca más marcharse.